1912 - 2009

 Aurora Aurea Garay, también conocida como Aurorita Francés, nació en Andraka - Lemoiz en el año 1912 y se educó en un colegio de monjas de Algorta, en el cual estudió hasta los 14 años, aproximadamente.

Desde muy pequeña fue una persona muy urbanita y  tenía claro que no quería vivir en Andraka sino en un lugar con más movimiento. Cuando acabó sus estudios en el colegio, su madre le ofreció la oportunidad de ir a vivir a casa de su tía, Eugenia Ecenarro, a Plentzia. Sin dudarlo, Aurora aceptó y comenzó una nueva vida en la Villa, ayudando a su tía en la mercería que tenía en propiedad.

Después de unos años, Aurora decidió trasladarse a Bilbao para aprender a tejer y, cuando adquirió todos los conocimientos necesarios, volvió a Plentzia, buscó un piso en la calle Artekale para vivir y abrió un taller en su propia casa en el cual tejía jerséis a medida y géneros de punto.

Aurora se especializó en jerséis para mujeres, hombres, niños y niñas. Menos para bebes, hacía prendas para cualquier persona. Su clientela acudía al taller y elegía el modelo de jersey y la lana y, posteriormente, Aurora compraba en Bilbao el material y ella misma confeccionaba y tejía todas las prendas a medida. 

En ocasiones, debido al gran volumen de pedidos, tenía que contratar a alguna persona para que tejiera las distintas partes de los jerséis, pero siempre era ella quien acababa las prendas cosiéndolas y armándolas. 

Además de en un taller, la casa de Aurora se convirtió en un lugar al cual la gente de Plentzia y, sobre todo, las personas más cercanas y familiares, acudía para charlar y hacerle una visita. Por mucho trabajo y pedidos que tuviera, Aurora siempre estaba disponible para ayudar a sus amigas y a su familia en todo lo que podía. Ya fuera en momentos de necesidad o de alegría, siempre estaba ahí para aconsejar y echar una mano. Era una persona que se implicaba mucho con sus vecinos y vecinas y no le importaba trabajar de noche si por el día había tenido que estar disponible para ayudar a alguien.

Aurora era valiente y decidida. Era persistente y no paraba hasta conseguir lo que se proponía. Durante la guerra su cuñado desapareció y Aurora comenzó a investigar, hablando con vecinos, vecinas y personas conocidas hasta que, finalmente, logró encontrar a su cuñado en un batallón de trabajo en Salvatierra. 

Aurora fue una mujer con un carácter muy especial que siempre tuvo claro que quería vivir sola. Tenía formas de hacer las cosas, costumbres y un modo de vida que no estaba dispuesta cambiar por vivir con nadie. Junto con esto, también será recordada por ser una mujer muy coqueta, siempre con sus zapatos de tacón, el pelo bien arreglado y muy bien maquillada.

En definitiva, Aurora Garai fue una persona muy querida en Plentzia, tanto por su familia como por personas conocidas, clientas y vecinos y vecinas de la Villa. Una mujer independiente que consiguió sacar adelante su propio negocio y construir una vida en tiempos repletos de carencia y dificultad.